jueves, 26 de noviembre de 2009

Día 26: the last party in the island

El día empezó a las 10 aproximadamente. Jose decidió irse a la playa mientras que a mi me dio por explorar la isla. El objetivo era ir a la punta de la montaña que esta justo en el centro. Tiene 300 metros de altitud. De paso vería también el interior del pueblo ya que aparte de la zona marítima, también tiene una escuela, una mezquita y muchas casitas donde vive la población nativa.

No sin esfuerzo llegue al techo de la isla desde donde habían unas vistas impresionantes. Allí me senté 1 hora a admirar lo que mis ojos veían.

Después de la excursión quede con Jose que nos encontraríamos en la playa.









Busque, busque pero no lo encontré. Decidí quedarme en la playa al lado de un tronco que me haría de almohada. Allí estuve absorto en mis pensamientos cuando Jose apareció. Nos quedamos un par de horas mas en el lugar y luego nos fuimos a la piscina para relajarnos, si cabe aun mas.

La piscina de hotel es muy agradable y uno se puede pasar horas allí, bañandose, leyendo o simplemente tumbado sin hacer nada. De todas formas antes se estaba mejor ya que ahora han venido varias familias con niños y se forma mucho alboroto, pero bueno, así y todo se esta muy bien en ella.

A las 18.00 era hora de irse a la habitación y cambiarse. De camino a la misma fue una sorpresa encontrarse al Boss. Jose al verlo dio un salto de jubilo e inmediatamente le pidió una foto. El Boss que llevaba otra víctima a sus bungalows, estaba un poco desconcertado ante tales honores.


Mientras tanto la víctima, un tío grande y con cara de pringaillo nos pregunto si los bungalows estaban bien a lo que le contestamos que si y nos pregunto porque nos habiamos mudado a lo cual le respondimos que queríamos piscina; entonces dijo si los del Boss no tenían piscina, y le dijimos que si y además llena de babes australianas y suecas con muchas ganas de party. El hombre no entendió nada aunque deberia haberlo entendido y uir de las garras de Boss mientras podía.

Mas no podiamos hacer. Al final se fue con el a sus bungalows. Lo que no sabia es que el Boss se lo comería vivo hay dentro, en su territorio, como ocurrió con nosotros. Pero antes de que el lobo y el corderito se fuesen para el matadero le dijimos al tipo que nos sacara una foto con nuestro querido Boss y así tener el recuerdo del hombre que en un día te puede desplumar de buen rollo, con su cara inexpresiva y con el consentimiento explicito de la víctima. Un maestro de la picaresca!!





En el hotel nos arreglamos y salimos para cenar y luego a continuar con la juerga ya que el miércoles es dia de party en la isla. Comimos sushi, abriendo la cena con el carpaccio de atún que estaba de muerte. Después de comer, tomamos unas cervezas y luego saboreamos unos chupitos que estaban bastante cargados.






A continuacion nos fuimos a la party que estaba justo al lado. Eso es lo que tiene este lugar que todo esta muy cerca.
La fiesta parecía muy animada y la gente estaba de muy buen humor, no es raro, jeje.






Estuvimos hablando con unas aquí, otras allí, con un español que andaba colgado y con un mejicano de dos metros que era una mezcla entre frankestein y fétido de la familia adams, es decir un engendro que además se creía muy guai...pobre iluso.

Después de darnos un buen tute estabamos bastante cansados y teniendo en cuenta que ya era bastante tarde, decidimos retirarnos a nuestros aposentos no sin antes tomar un par de chupitos, esta vez a palo seco.

Este fue nuestro penúltimo día en la isla....:-( pronto la cruda realidad, no,no,no!!!!!!


- Posted using BlogPress from my iPhone

No hay comentarios:

Publicar un comentario